Marcia y David, me los presentó
Isabelle en Sydney y pasé con ellós mi ultima noche en Australia,
hablando de su ciudad, Salvador de Bahia, compartiendo un muffin de
Adriano Zumbo y escuchando a una tal Yvete Sangalo de fondo ( quien me hubiera dicho que la vería en cada esquina de su ciudad..)
Aun me acuerdo de sus caras cuando les
conté de que había reservado ya un hostal en Salvador, en una calle
no muy lejana del Pelourinho, y que tenía pensado llegar al dicho
hostal sobre las nueve de la noche en el medio del Carnaval.
Me mirarón con cara de “¿¡Eres
tonto o que?!
Efectivamente no tenía ni la minima
idea de lo que se puede llegar a montar en Salvador durante el
carnaval y sobretodo de que llegar con la maleta en ese lugar a esa
hora, era algo una mijuita complicado o mejor dicho, imposible. Así que el Pelourinho quedó sólo para un paseo por el atardecer...
Abortado el plan de cruzar la avalancha del carnaval, los chicos,
nos propusieron quedar en casa de Rogerio y Mariana, esta ultima,
hermana de Marcia y acabamos no solo con un nuevo apartamento, sino
que con toda una familia de adopción; me encanta Brasil.
Llegamos al aeropuerto y los chicos ya
estaban esperandonos, unos abrazos de presentación oficial, y
directamente para el carnaval, pasando a recoger antes a más amigos: Neide,
Alexandre y Leandor, en siete en un mismo coche.
Si alguien se preguntase si eso es
posible, le contesto que, bueno a lo mejor en otro coche no, pero en un Fiat Italiano,
por supuesto que si: 2 delante y 5 detrás...
El Carnval de Salvador de Bahia es
totalmente diferente al de Rio, los dos, especiales a su manera los
dos para descubrir. En la ciudad Carioca, el carnaval es más
istrionico y más de observación, el de Salvador es pura locura, una
explosión de pasión, ritmo y energía que te arrastran.
Os explico como funciona aquí. Hay
unos camiones que cruzan la ciudad por un recorrido; encima
de ellos hay una plataforma donde un artista toca su musica
acompañado por su panda. A lo largo de todo el recorrido, montan
unos casoplones gigantes llamados “camarotes” que tienen
terrazas en las que, asomandote estas más o menos a la misma altura
del camion que pasa con los cantantes; En estos camarotes hay todo tipo de confort, en algunos hay hasta masajistas por si estas cansados, ademas de barra libre,
comida libre, conciertos libre, roce libre y creo hasta cama libre...
Si no quieres pagar para el camarote, hay dos
opciones, pagar para estar andando y bailando detrás de un camion o
hacer de “Pipoca” y quedarte como espectador al margen de la calle.
Cualquier opción tu elijas va a ser
igual, en el sentido que aunque según diferentes proporciones, vas a
estar en el medio de la “locura”.
Esos mismos siete, llegamos a casa de
Lucineia, mamá de Rogerio, un poco de aclimatación y lo últimos consejos para los guiris de turno (nosotros) antes de salir para la calle.
Pequeña paréntesis fonética o idiomatica o como queráis: aunque me esfuerce de imitar el acento portugués de Brasil, no hablo, ni entiendo papa y este vídeo es una clara demostración que, llegado un cierto momento sería mejor retirarse que seguir haciendo el ridículo :) eah lo he dicho.
Durante el carnaval las calles estaan llenas de
puestecitos para que nunca te falte una cervecita en la mano.
Despues de un largo trabajo de convinción, consegui que Mariana
viniera conmigo a comprar uno de esos churrasquinos que se cocinaban
al aire abierto y de los que me habían desaconsejado la ingestión,
por ser supuesta carne de gato...pero que ricos.
A esa hora de la noche el churrasquino
fue un manjar; el “gato” se despertaría a la mañana siguiente
pero esa es otra historia.
Desde una posición de observación
privilegiada, de vez en cuando nos ibamos acercando más al "marasma" del flujo principal, persiguiendo a Leandro, guia oficial del nuestro
carnaval por Salvador.
Noche intensa por ser la primera,
sobretodo si le añades una sesión-after a las cuatro de la
mañana a base de “frijolada” y “lasaña”
ofrecidos por Lucineia. Que buena noche y que buena compañía.
El día siguiente fue el ultimo día
del Carnaval, y nos levantamos justo a tiempo para meternos otra vez en
el pandemónium.
Quedamos con Leandro y dos otros amigos
- Danilo y Fabio - para adentrarnos en una calle de la ciudad que iba
a ser el “Stock Exchange” de Salvador; mercancia de intercambio:
camisetas.
El plan del día era el de seguir uno
de los camiones, más en concreto el de la cantante Daniela Mercury.
Ahora, para poder seguir uno de estos camion-discoteca, osea para poder bailar detrás de uno de ellos acompañandolo durante todo su recorrido, te hace falta comprar una
camiseta especial. Si no te has movido antes, a ultima hora tienes que ir a conseguirla en esa
famosa calle, negociando con los reventas, como con los titulos de bolsa.
Tratativas cumplidas, estabamos listos
para otra noche de machacón, que divertido.
Bueno ¿Que decir? Creo que ya no tengo cuerpo para "estos tour de force", creo que necesito unas vacaciones de las vacaciones para recuperarme del carnaval de Brasil.
...Hoy es el día después, ya no es lo mismo nos hemos despertado con un poco de melancolía por tener que despedirnos de nuevos amigos, de la ciudad y de
una fiesta tan increible como solo aquí en Brasil se puede vivir.
Estamos en el supermercado y mientras pensamos en que el próximo año vamos a estar aquí de vuelta, Maria se nos acerca y nos pregunta con acento familiar: no seréis sevillanos?
Fue decirle que si y ella pegarnos un abrazo.
Acabamos comiendo un helado con ella y su marido Diego, como amigos de toda la vida.
Los andaluces están hechos de otra pasta, que arte.
Acabamos comiendo un helado con ella y su marido Diego, como amigos de toda la vida.
Los andaluces están hechos de otra pasta, que arte.
Hasta proxímo año.
Le damos la bienvenida a mi casa fue muy gratificante, no puedo hablar español o italiano, pero entiendo lo que hablan, tal vez para poner en mi DNA, la conciencia colectiva, la marca de mis antepasados. Este tributo confirma el inicio de una gran amistad. El año que viene espero que no sólo disfrutar del carnaval, tal vez para ir a la Chapada Diamantina con usted. Texto muy rico en detalles. Gracias
ResponderEliminarComo puedo ver os lo habéis pasado fatal en Brasil. Sois la caña es increíble que en vuestro camino encontréis a tanta gente maravillosa. Magnifico viaje !!!!
ResponderEliminarCuando volváis vais a tener tantas historias que contar.
Me alegro !!!!!
Os quierooooooo!!!!!!!!